por cuifa » Lun May 22, 2017 2:42 pm
Patronato es un rival de muy poca monta como para entusiasmarse con una rápida recuperación de BELGRANO, pero está demasiado claro que el equipo va mejorando, lento pero mejorando al fin, como para que sigamos con tanta mala onda como si el presente fuera el de hace un mes cuando este partido hubiera terminado 2 a 0 a favor de los entrerrianos y sin que les pateemos al arco.
Nos cansamos de generar situaciones y, en la mayoría de los casos, no por espasmos ni pelotazos, sino por jugadas nacidas en circulación rápida y por abajo. En este partido tuvimos más chances de gol que en el resto del torneo. Deberíamos haber ganado 3-1 y no se podría decir nada. Sólo que, a lo mal que hemos venido jugando, se suma que tenemos más sal que la laguna de Mar Chiquita.
Más allá del moco del pase atrás de Melano y que alguno puede pensar que a esos centros al área un central o el arquero las tienen que sacar, es inviable pretender un equipo que nunca tenga errores en alguna jugada, hablando de la parte defensiva. El centro del lateral de Patronato fue rápido y perfecto, hay mucho mérito de ellos ahí.
El problema, como ya varios mencionaron, es que no le hacemos un gol a nadie, nos cuesta un huevo, Bértoli atajó todas pero absolutamente todas le fueron al cuerpo; entonces, lo fácil es cuestionar a la defensa si nos clavan un gol pero al fútbol se juega haciendo goles y los que están arriba vienen defeccionando uno tras otro.
Suárez parece haberse recuperado y Barbieri ha tenido dos partidos como para garantizarse titularidad, pero el resto de mitad de cancha para arriba juegan como para irse: Bieler ni fu ni fa, Melano que pareciera que llegó a primera sólo porque corría rápido, Velázquez ni vale la pena analizarlo, Aquino es muy ciclotímico y Márquez me secó los testículos, porque ahora lo pusieron de delantero y tampoco dio ni ocote.
Bajo ese panorama de rendimientos individuales muy bajos, el Gallego de a poco está encontrando un funcionamiento que nos garantiza llegar aunque sea a tener nuestras necesidades básicas satisfechas, lo que no es poco pensando es que veníamos cayendo en un tobogán directo a la indigencia. A partir de junio, renovación mediante, puede ser que sea tiempo de volver a soñar con comer asado todos los días.
Sdos.
Si el perro es manso come la bazofia y no dice nada, le cuentan las costillas con un palo a carcajadas!
Demasiados los moretones, muy pocos encantamientos, son tantos los cocineros que joden la sopa...