jcv63 escribió:Benjamin
Seguro que esl hombre es liberal . Pero por eso un funcionario ( Gonzales ) con la influencia de los muchachos de carta abierta a influenciar con el poder de funcionario , que los mismos generan en las desiciones de las actividades privadas ?.El objetivo era claro, quiatrle protagonismo al hombre que piensa distinto , desde ese poder que te genera la chapa .
Pero si no estaba mal ? porque Cristina intervino y lo obligo a rectificarse ante la sociedad con una carta comunicando el cambio de posicion.
Por otro lado me decis que trabajo para la campaña de PiÑERA . Pero no lo recuerdo crticando a la BACHELET. El tipo no ataca gobiernos populares si no los populistas y demagogicos , tan tipicos en latinoamerica , que llegan al poder y no se quieren ir mas del mismo . Utilizando todos los recursos , cambiando leyes y haciendo todo lo necesario para quedarse hasta el dia del juicio final . Pensemos en la region , donde pasa esto y donde no es asi . coincide con los que fustiga Vargas Llosa y cuales no .
Pocos como Vargas Llosa han defendido las ideas que la mejor izquierda ha reclamado tradicionalmente para sí. Que yo recuerde, no hay otro novelista de su generación que haya defendido con tanta terquedad la libertad del individuo, o que tanto haya defendido al individuo frente a las mil fuerzas que lo amenazan diariamente. Vargas Llosa se ha enfrentado a toda forma de autoritarismo, desde el que ejercen los Gobiernos del signo que sea hasta el que practica, con tan dañinos resultados, la ubicua Iglesia católica. Y no hablo de sus novelas, que son formidables alegatos contra todas las formas de poder (público pero también íntimo). Hablo de sus columnas y sus ensayos y sus discursos, donde Vargas Llosa ha defendido el derecho de las mujeres a abortar, la igualdad para los homosexuales, la legalización de la droga, y donde ha atacado los nacionalismos de todo tipo y los recortes a la libertad individual, cualquiera que sea su justificación. Frente a otros escritores latinoamericanos de su rango, Vargas Llosa no ha considerado que la libertad de expresión o la integridad personal puedan violarse si el que la viola se dice socialista, ni que el despotismo militar sea aceptable si se produce en nombre de un ideal noble, de un futuro mejor o de una sociedad perfecta. Al contrario que tantos otros, Vargas Llosa nunca ha considerado que las ideologías sean más importantes que los hombres. La vida de una sola persona humana, recordaba Vargas Llosa que decía Camus, es más valiosa que cualquier idea. Y así ha vivido.
Juan gabriel Vazques - Fuente Diario El PAIS
Hay algo que aclarar, que creo es importante. Vargas Llosa hace exactamente lo mismo que le endilgas a los intelectuales adherentes al modelo nacional y popular. Pero vale la pena contextualizar porqué ambos parecen disputar en el mismo sentido. Existe un campo de disputa cultural por el prestigio simbólico, por el peso específico de la referencia que puede generar tu nombre. Un Nobel, por caso, te suma bastantes porotos para cierta tribuna de ese campo (la opuesta a la que reivindica el rechazo del Nobel por parte de Sartre). Pongamos el ejemplo de Borges, desesperado por el galardón y activo militante dentro del campo cultural por la “liberalización” del mismo (que implica la canonización de algunos y la marginación de otros autores, o de formas de literatura. En otras palabras una posición conservadora sobre el campo cultural). Y en este punto creo que se evidencia notablemente la disputa, porque hay una variación común en ambos (VLlosa y JLB) que solo puede responder a su posición, a su interés por disputar dentro del propio campo cultural. Borges paso de ser un vanguardista (de hecho adscribía a una corriente vanguardista) cuando joven, a ser un conservador, como ya mencione, paso de ser alguien que defenestraba el tango, a reivindicarlo décadas después (cuando decía que ya no era un fenómeno tan popular). Vargas Llosa pasó de ser un intelectual duro de la izquierda latinoamericana a ser un defensor a ultranza del neoliberalismo. En ese entonces ser de izquierda era casi una condición de sin equanon para pertenecer al parnaso de los hombres de la cultura latinoamericana. Hoy, no lo es. Es casi uno de los únicos que en lugar de tener un giro hacia la derecha con tintes socialdemócratas, pasó a ser un adepto literal a la muerte de las ideologías, un acólito de la escuela de Fukuyama. Con todo esto quiero decir que muchas veces para estos intelectuales las convicciones personales no son políticamente convenientes. Y no tengo nada en contra del pragmatismo. Pero las posiciones del escritor peruano son groseramente pobres. Y la de los intelectuales de Carta Abierta, ciertamente, son las de un bicho raro (hablo del compromiso político de parte de un intelectual con un proyecto político específico, a lo "Sarmiento o Alberdi"). Vargas Llosa evidentemente no va a atar su prestigio al gobierno de Piñera, pero es casi una institución para los medios masivos fieles al consenso de Washington del continente. Quizás hubiese sido más fácil, más digerible mediáticamente para muchos, un enfrentamiento entre dos premios Nobel que opinen de forma contrapuesta sobre la situación del país. Por caso, el Nobel de economía Joseph Stiglitz.
Dicho esto, me queda pendiente el encontrar alguna declaración en la que el escritor Peruano critique a la Bachelet, te la debo. Pero me parece una confesión de parte militar activamente por el proyecto del multimillonario presidente, limpiar su imagen pinochetista. También vale aclarar que el mismo embolsa en una misma categoría gobiernos de Colombia o Perú con los de Uruguay y Brasil, en su lucha contra el bolivarismo de Chavez. No es necesario aclarar las posiciones de Lula y Tabaré o Múgica a este respecto. El necesita armar esa bolsa de gatos para fundamentar su posición.
Y sobre el comentario de Vazquez (también te debo referencia alguna sobre él) puedo decir: Los matices ideológicos que atraviesan a la sociedad están bastante más entreverados de lo que podría pensarse cuando se hace una división tajante entre izquierda y derecha. Alguien por caso puede ser un oligarca, pero por ser homosexual puede apoyar la ley de matrimonio igualitario. Se puede estar preocupado por una ley que despenalice la marihuana, que permita el aborto, el divorcio, de protección del medio ambiente, pero que no revista interés entre sus preocupaciones la distribución del ingreso.
El considerar ciertos tipos de libertades individuales escindidas del resto de garantías materiales y derechos adquiridos, es una falacia. El hablar de cierto tipo de régimen democrático que ampare más esas libertades por el hecho de achicar las funciones del estado, es la mayor de las mentiras, porque supone que el estado puede garantizar con un paraguas legal todo lo que la sociedad necesita. Habría que debatir con estas concepciones sobre la naturaleza de los impuestos y la naturaleza del monopolio de la fuerza por parte del estado.
Queda pendiente el debate sobre el foco mediático, sobre el recorte que se hace de un debate más amplio que una exposición en una feria o que la oposición a un turno, o a una hora, o al privilegio del enfoque que hacen esos mismos medios a determinadas referencias, como este señor.
Voltearon a Illia con la campaña de la tortuga. Fueron cortesanas de los sucesivos gobiernos de facto. Voltearon a Alfonsín.Resaltaron la falta de etiqueta del despojo noventista.Hoy siguen siendo coherentes.