Error es error. Aquí se discute más o menos un error según el nombre propio. No debe ser así, error es error.
Tengo que decir, para algún que otro muchacho con errores groseros en la interpretación de textos, que si bien Olave se equivoca en la jugada del gol de Central, no es una jugada fácil. Y que, además, como ya adelantara, se equivocan los defensores, los volantes, equipo entero, en dejar venir a dos monitos de azul y amarillo como si estuvieran en el patio de su casa, jugando el picado en donde el dueño de la pelota es el gordito que termina haciendo el gol -en éste caso Zelaya-, o si querés, el hoy decadente Cristian González. Por eso, en función de ésta nefasta jugada -y de otras que no viene al caso enumerar-, unas cuantas palabras atrás, mencioné que tristemente Belgrano no estaba listo para ascender, porque ni siquiera pudo ni supo palpar de cerca la situación, y que en realidad la actuación de Belgrano no es tan elogiable como se la pintó -pero sí que jugó mucho mejor que lo que lo venía haciendo en el torneo, sin lugar a dudas-.
Yo creo que Central se tendría que haber ido a la B, porque es un equipo de cuarta -supongo que se desangrará hasta hacerlo como les sucedió a las gallinas, así que peor para ellos-, pero creo que Belgrano también debía quedarse en la B. En todo el año rara vez me dió la sensación de ser un equipo que mereciera pelear siquiera un ascenso.