Diego Osella busca una solución a la falta de gol del equipo en lo que serán los últimos dos partidos de Belgrano en la Superliga y en la que estará en juego la permanencia en Primera. Por esta razón, el técnico en el ensayo del sábado a la mañana en el predio de Villa Esquiúcolocó dos atacantes netos en el equipo titular.

Primero fue con la dupla Anthony Uribe y Gonzalo Lencina, para después cambiar y ubicar a Diego Mendoza junto al juvenil Lencina.

Desde que arrancó el año los delanteros de la “B” no han convertido en los ocho partidos jugados y los cuatro goles logrados se los repartes: Lértora (2), Meli y Lugo, todos volantes.

La inclusión de “Matatán” es una alternativa en procura de ganar en eficacia en los metros finales, el lugar donde se “concluyen las jugadas”, porque es allí donde falla el Celeste según entiende su DT: “Las situaciones las generamos, a veces con juego, otras a los empujones, pero no estamos serenos a la hora de concretar”.

Tomando este año, Mendoza jugó desde su arribo a Córdoba todos los minutos en los ocho partidos que lleva disputados el Pirata, es decir 720 minutos. El otro atacante que más minutos estuvo en campo es Mauricio Cuero, quien completa 678 en ocho partidos. Leonardo Sequeira también estuvo en todos los encuentros en el terreno con 285 minutos. Finalmente el caso de Uribe (59 minutos en dos partidos) y Lencina (15 en uno), los que menos jugaron.

Hacer goles y ganar, la empresa que tiene por delante el Pirata para lo que resta de la Superliga.