Todas las mañanas se lo puede ver por Villa Esquiú. Su cabellera y su porte son inconfundibles. Se trata de Juan Carlos Olave, el director deportivo de Belgrano, quien fue llamado por esta conducción para ser responsable (o uno de ellos) a la hora de las contrataciones futbolísticas del Pirata.

Siempre dispuesto, sobre el presente plantel, el exarquero le dijo a Mundo D: “Estamos tranquilos y debemos mantenernos así a lo largo de todo el proceso. Haber ganado dos partidos no es haber logrado algo. Y no ganar no es una debacle. Este es un equipo en formación con un DT que llegó hace poco más de un mes”.

–¿Qué porcentaje de responsabilidad le cabe a Olave en la contratación de futbolistas?

–Tengo participación y responsabilidad, pero esto es un trabajo de equipo, aquí las cosas se hacen consensuadas con los dirigentes y el cuerpo técnico. El tema de tener una función no quiere decir que tenga potestad de decidir solo. Cuando se hace una contratación, se habla con todas las partes.

–¿El proceso se va dando de acuerdo con lo que imaginaron?

–Sabíamos que se iba a dar de a poco, es un plantel de 26 jugadores en el que se encuentran casi 16 nuevos entre “repatriados”, refuerzos y juveniles promovidos. Además con una idea nueva que la empezó Sebastián (Méndez) y con el inconveniente que genera un cambio de entrenador a mitad de camino. La llegada de Pablo (Lavallén) nos permite seguir con esa línea pensada.

–¿Cuándo las cosas no salen bien se buscan responsables y cuando van bien también?

–No, cuando estás de este lado no es así (se ríe). Si las cosas andan bien son los jugadores y el técnico, las responsabilidades de este lado hacen que si se anda mal vas a estar apuntado y el reconocimiento, si sale bien, pasa por otro lado. Lo único que quiero es hacer lo mejor para Belgrano y que le vaya bien, que se mejore, que se proyecte y que se cumplan los objetivos.

–Las contrataciones son consensuadas con el DT. La experiencia Méndez, quien estuvo seis partidos con este plantel, puede hacer cambiar esto…

–No creo. Porque hay jugadores que los pidió Sebastián, otros los trajimos en conjunto, otros vinieron para completar la plantilla o para ser apuestas. El armado del plantel no es traer todos los jugadores para que sean titulares. Tenemos que conformar un grupo, porque no se puede jugar con 11 Messi, hay que lograr que el conjunto se interrelacione porque a todos les hace falta algo del otro.

–¿Es completo el plantel?

–A mi entender tenemos un buen plantel, que se puede potenciar aún más. Nosotros confiamos en los jugadores que trajimos, en los que se quedaron y en los promovidos. Es una nueva formación, todo lleva tiempo. Hay gente que quiere resultados inmediatos y en el fútbol eso no se da. Lo que se pretende son resultados con sustento en el tiempo y un equipo con la identidad de Belgrano.

–¿Piensan en los refuerzos?

–Es una tarea constante y que no se detiene. Tenemos gente siguiendo las ligas de Sudamérica o los torneos del ascenso. Al DT durante el campeonato no le traemos inquietudes, pero en cuanto concluya nos sentamos y le presentamos lo que hay de acuerdo con las necesidades que él plantea.

–Pero la lista de jugadores la tienen ustedes…

–Claro. Después, si el DT quiere algo especial, se analiza y se ve si es una opción que no estaba contemplada. Allí se analiza lo que pide, los argumentos que presenta y, obvio, el presupuesto… Se analiza un montón de cosas.

–¿Se habla de descenso?

–No. Nunca hemos negado que hay que escapar a la zona caliente de los promedios, pero lo que creo es que no te debés obsesionar con lo malo, sino con lo bueno, porque una cosa nos va a llevar a la otra. Nuestro objetivo es estar en zona de copas y eso nos va alejar de lo otro. Hay que sumar para zafar este año, y el año que viene también habrá que hacer una gran campaña. Belgrano necesita de todos y que sumemos esfuerzos.

–Fue una decepción Méndez…

–Uno debe entender que hubo cuestiones personales, pero no lo fue. Es un gran tipo con el que me llevé muy bien, habíamos proyectado un largo tiempo de él en el club, pero las situaciones personales no las pudo sobrellevar.

–¿Ser director deportivo afectará tu imagen con el hincha?

–Sentí la necesidad de que tenía que poner la cara, porque esta función es para poner la cara, después me pueden putear todos a mí, pero voy a poner la cara siempre. Sentí que Belgrano necesitaba que estuviéramos adentro, lo más fácil era quedarme afuera, venir a la cancha y alentar. Pero decidí correr el riesgo y entendí que venir con esta gente era el camino correcto y ahora veo el accionar de otra gente y me doy cuenta de que estuve en lo correcto.

–Si les va bien o mal, también es responsabilidad tuya…

–Dependo del resultado, esto es así. Tomé la función de decidir y sé que tengo más responsabilidades y poquitos derechos.