Visualizar los nuevos objetivos, plasmar nuevas ideas y corregir errores. En la última reunión de CD pudimos apreciar informes que nos enorgullecen por su trabajo y logros, pero también algunas señales de alerta sobre cuestiones que debemos analizar y dar a conocer a la gran masa del pueblo celeste.

En ese sentido, en los próximos días comunicaremos los resultados de la encuesta realizada a los socios, mostraremos el conjunto de la planificación estratégica, el modelo de gestión deportiva que venimos conformando, las posibles etapas para encarar la remodelación del estadio, y resumir en algunos datos la evolución del trabajo físico y médico de los diferentes planteles.

En el marco de este receso y apertura de libro de pases, frente a la obligación de proteger el patrimonio del Club, les comentamos que estamos muy preocupados por las enormes presiones a las que son sometidos nuestros  jugadores, por parte de intereses de terceros; presiones que afectan notablemente a Belgrano. Por ello, y como decíamos más arriba, seguimos trabajando y estamos estudiando hacer públicas esas maniobras, para dejar expuestos a los responsables y a su vez declararlos personas no gratas, impidiéndoles su ingreso (en cualquier aspecto) a la estructura del Club.

Estamos pensando en el fútbol argentino a través de Belgrano. El poco respeto que tienen por las instituciones es un mal habitual, eso incluye a todos los protagonistas del fútbol. Hay que cambiar una cultura que ya es caduca, nociva y basada en ambiciones materiales que sólo busca el lucro a cualquier precio. El valor pareciera ser sólo dinerario; la camiseta, el respeto por el ser humano, por el barrio, por el Club, por la palabra empeñada, por el agradecimiento a la institución formadora queda de lado;  toma su lugar  la avivada, el trabajo rastrero que busca confundir  sin respetar valores elementales.

Les dicen a los jóvenes jugadores “es ahora o nunca” y los invitan a saltar al vacío de la falta de ética. Pareciera que todo es canjeable, que el mérito no existe sino el acomodo, que no se llega por trabajo sino poniendo plata. Es lamentable. Queremos luchar contra eso. Adentro y afuera de nuestra estructura. Por eso,  llegado el momento oportuno, denunciaremos cómo trabajan algunos en el fútbol de hoy, a quienes queremos tener lejos ya que no representan nuestros valores.

Nuestra responsabilidad es hacer lo mejor en Belgrano y denunciar a quienes atenten contra la institución.