SU ÚLTIMO GOL, EL ÚLTIMO GOL. Fue en el 1-2 vs. Tigre, en mayo.
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La pelota queda muerta sobre la línea del arco y el Picante la agarra con toda la fuerza. Le mete un bombazo terrible. Pero nadie lo grita a su alrededor. Es solo una bocha muerta en un ejercicio de práctica. Pero para el 7 bravo algo se esconde detrás de esa acción: la búsqueda del gol, la llamada del maldito gol que no aparece por Belgrano hace 513 minutos. Cuando el punta mira como se infla la red piensa que hoy, allá en Rosario, la imagen podría ser la misma. Los piolines estirándose como una gran esperanza.
César Pereyra tiene revancha esta tarde ante Newell’s. Desde las 17.15 buscará el gol o trabajará para que el equipo vuelva a abrazarse. Aunque sabe que cuando la pelotita no entra, los ojos se van con los atacantes. “Es la función que cada uno tiene adentro de la cancha. Somos los que estamos en las terminaciones de las jugadas, los encargados de meterla. Más bien que es un trabajo de equipo y no importa quién haga los goles, sino el resultado. Pero nosotros estamos en el ojo de todo”, le dice a Día a Día el protagonista del último festejo Pirata. ¿Cuándo fue? El 5 de mayo ante Tigre en la caída 2-1 por la 17ª fecha del Torneo Final. Lejos de esquivar la responsabilidad, Pereyra asume que son los delanteros los que mayor obligación tienen en marcar.
“La asumo, sino jugaría de cuatro, je, je. Uno eligió esta posición y te ponés contento cuando hacés goles y todos hablan; y cuando no la metés, también hablan. Siempre lo van hacer”, reflexiona quién en el Inicial 2013 fue el máximo goleador del campeonato con 10 pepas.
–¿Te molesta el modo en que se habla sobre la falta de efectividad?
–Cuando las críticas son sobre el juego y lo que se ve y no son de mala leche...
–¿Cuál es la diferencia entre una y otra?
–Y cuando se habla mal. Creo que cuando se analiza desde el punto de vista solamente por los goles. Si yo hago un mal partido los noventa minutos y meto el gol de la victoria nadie se fija si yo estuve en buen rendimiento o si estoy mal. En cambio, cuando uno no la mete, por más que asista a un compañero o desborde y tire 10 centros o corra para marcar, si no la metés, evaluarán el no convertir.
A sus 32 años el Picante no se confunde. “No solamente por hacer goles uno anda bien”, dice, pero admite que los desea como nadie. “Como digo siempre: el gol también es una circunstancia y se dará cuando se tenga que dar. Obviamente que quiero hacer goles. Quizá en otro momento estaría desesperado. Si tuviera cinco o seis por partido y me las erra a todas...”, apuntó.
–Una vez dijiste: ‘Critiquen cuando las que tenga sean claras’...
–Igualmente no lo uso de excusa ni trato de escudarme en eso. Si me queda una, la tengo que tratar de mandar adentro. Están quedando, pegan en el palo, la saca el arquero, la tiro afuera, pero no son abundantes para volverme loco.
–¿Hay autocrítica de tu parte? ¿Te decís ‘ando errando goles que no debería’?
–Siempre hago autocrítica en base a lo que hago y lo que tengo. Y siempre busco tratar de mejorar. Estoy positivo, confiado en que la próxima va entrar y trabajo para estar preparado cuando llegue el momento.
La caída 1-0 ante Boca estiró a 10 los partidos sin ganar (el último fue el 6 de abril ante River 2-1 en el Kempes) y además trazó tres derrotas consecutivas por primera vez desde que Ricardo Zielinksi es el DT.
Y el Picante no es ajeno a todo lo que se habla, pero planta su postura: “Uno lo escucha lamentablemente porque están repitiéndolo y es parte de eso. La estadísticas, los partidos que no ganás, los partidos que no convertimos. Pero uno no se puede quedar ahí, tiene que tratar el próximo partido de poder romper la racha. Toda racha se corta y ese es el objetivo nuestro”.
Sin gambetear como cuando tira las diagonales, César para la pelota. Se mira desde afuera y sobre su nivel responde: “Uno está tranquilo, sabe lo que le aporta al equipo. Acá han pasado muchos jugadores que vinieron como goleadores y no la han podido meter y se fijaban solamente en los goles. Y por ahí no miraban que el DT les pedía otra función adentro de la cancha para ayudar al equipo”, sostiene quien lleva 47 goles en 162 partidos desde que llegó a Belgrano.
Lejos de empantanarse en los malos pensamientos, el 7 llama al gol. Hoy lo hará frente a la Lepra y ayer lo hizo en el predio de Villa Esquiú pegándole a la pelota aunque no hubiera arquero. “Uno trata de ir agarrando confianza con esas cosas. Es tratar de meterla, que entre de cualquier forma. Los otros días tuvimos una situación muy clara que en otras circunstancias pegándole mal entra. Cuando está de racha y no quiere entrar, no va entrar”, dice y en sus ojos se dibuja un arco enorme todo para él. Es que sueña con cortar la sequía.
–Algunos hablan de trabajar la eficacia. ¿Pero cuánto hay de azar o de suerte a la hora de la definición?
–Es un poco de todo. Obviamente que uno trabajando ayuda a mejorar. Hay veces que uno busca la mejor forma, la mejor definición, de pegarle tranquilo y la pelota no entra. Y capaz tiran un centro, la pifias y la mandás adentro y eso no se entrena.
–¿Están más nerviosos afuera que los adentro por la falta de gol?
–Yo creo que sí. El fútbol es así. Cuando las cosas no se dan se empieza a hablar demás y uno adentro tiene que estar sereno para no volverse loco con eso. Puede ser que estén un poco ansiosos, pero hay que estar tranquilos. Cuando uno menos lo espera, el gol va a llegar.
–¿Le hablás al gol para que venga? Hoy (por ayer) le pegabas arco como para que entre con toda y sacar la mala.
–No sé, de cualquier forma, pero que venga el gol. Uno siempre piensa en el gol, soy delantero y uno vive de esto. Más allá de que no te tiene que desesperar y volver loco, pero es mi función y tengo que tratar de poder hacerlo por el bien del equipo.
Esta tarde, en Rosario, el Picante hablará solo por la cancha. No es que habrá vuelto loco, sino que le preguntará a gol si ya no es hora de volver a encontrarlo.
Con el mismo 11 titular en Rosario
El DT Ricardo Zielinski mantiene el equipo que viene de perder con Boca. Y la dupla de ataque será Pereyra-Jerry Bengtson. “Uno tiene otra referencia y tiene con quien jugar. Tratar de jugar corto y no ser tan largo. Es lo que estamos tratando de hacer. Llegar con bastante gente y obtener un poco más de juego. Lo vamos entendiendo y agarrándole la mano”, dijo el Pica sobre Jerry.
En el banco de suplentes estarán Pablo Heredia, Carlos Soto, Esteban González, Emiliano Rigoni, Lucas Parodi, Fernando Márquez y Julio Furch.
Ayer, La reserva de Belgrano venció 2-1 a la de Newells, con goles de Giordana y Alanis en el partido que se disputo en el predio de la Lepra en Bella Vista, Rosario.
FIRMÓ. El juvenil volante Lucas Cochi firmó la renovación de su contrato hasta 2016. El jugador integra el plantel profesional y actualmente juega en Reserva de AFA.
INFERIORES. Por la Zona campeonato Belgrano enfrentará hoy a Gimnasia.
