Torneo bien corto. Por el Mundial que se jugará a partir de junio, para Farré el torneo será muy especial por lo intenso y por el poco tiempo que habrá para jugar
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Después de un doble turno en el que se alternó trabajo físico y ensayo de fútbol en el complejo Poulsen, el regreso al hotel Ñiken fue distinto, porque mientras los más grandes aprovecharon las últimas horas del viernes para adquirir presentes para sus familias, algunos de los juveniles, entre ellosGiuliano Bardín, Federico Álvarez, Nahuel Luján y Emiliano Rigoni, hicieron “piruetas” en la piscina del hotel.
Pero uno de los más felices en la costa es el capitán del equipo Guillermo Farré. El volante celeste vio nacer a su hija Guillermina en esta semana (“Siempre quise que mi hija llevara ese nombre y ya lo habíamos hablado con mi señora”, confesó) y aunque la familia y las cábalas no van de la mano, cuando nació Salvador (su primer hijo), tres meses después el Pirata logró el ascenso en cancha de River y él marcó el histórico gol.
Entonces, ¿por qué no esperar lo que la nena trae?
“Si viene con un pan bajo el brazo como el varón, me pongo una panadería”, aseguró Farré entre risas y con sus ojos iluminados al hablar de sus niños y su familia.
Todos los frentes
Pero más allá de sus alegrías personales, Farré habla de lo que se viene para Belgrano en una competencia que estará comprimida en su fixture por el Mundial de Brasil.
“Este va a ser un torneo distinto a cualquier otro, por la intensidad y el corto tiempo en el que se jugará. Nosotros debemos prepararnos para estar a pleno y sabiendo que puede que cada tres días tengas que afrontar una final. Además, tenemos que saber que habrá algunos equipos que tendrán doble competencia y eso les generará desgaste y rotación, lo que de estar concentrados y jugando a lo Belgrano, puede darnos una ventaja”, asegura.
Después del Torneo Inicial que ganó San Lorenzo con la menor marca en un torneo corto y de una irregularidad inusual en todos los equipos, la hinchada se ilusiona con que el Pirata meta un campeonato bueno y pueda darse el gusto de una vuelta olímpica.
Para el capitán el tema se sintetiza así: “Entiendo que el certamen que se viene puede ser irregular como el que pasó. Nosotros tenemos que potenciar y perfeccionar nuestro juego, sabiendo que se puede dar más y que en cada partido que jugás tenés las mismas posibilidades que el rival. Uno piensa en conseguir lo más lindo, en lo que la gente y nosotros queremos que es un campeonato. Pero debemos entender que hay 20 equipos que tienen la misma ilusión y solamente uno festeja, aunque está claro que lo que Belgrano logró lo hizo por mérito propio y nadie le regaló nada”.
“Año tras año es difícil revalidar lo que se viene haciendo. Tras lograr el ascenso a Primera, todos los años nos hemos ido superando y eso es importante destacarlo, porque significa que el equipo no se estancó y si esta temporada logramos superarnos, estaremos hablando de cosas importantes”, agregó.
Finalmente, cuando se lo consultó sobre una nueva clasificación a un torneo internacional, Farré fue claro: “Se logró la temporada pasada y se disfrutó, entonces que no sea una excepción, sino que se pueda dar todos los años. No es sencillo, pero es un desafío más para nosotros”.
Zielinski probó con dos sistemas de juego
Después de una jornada con temperaturas que estuvieron por encima de los 27 grados y con mucho viento, el plantel cumplió con la sexta jornada de pretemporada en la costa. En esta ocasión con un doble turno en el complejo Poulsen.
Por la mañana fueron trabajos físicos y por la tarde fue el tiempo de los ensayos futbolísticos. Nuevamente el entrenador Ricardo Zielinski probó con el esquema habitual de 4-4-2 en el que formó con: Olave; Barrios, Lollo, Aveldaño (foto; volvió a jugar para los titulares) y Quiroga; Rigoni, Farré, González y Velázquez; Bueno y Pereyra.
Después, en los minutos finales del trabajo, el esquema del entrenador pasó a un 3-4-1-2, con la particularidad que el jugador más adelantado del medio campo fue Fernando Márquez.
En esta segunda prueba formó con: Olave; Aveldaño, Lollo y Quiroga; Rigoni, Farré, González y Velázquez; Márquez; Pereyra y Bueno. El plantel cerró la semana sin lesionados el trabajo en Necochea y con los 32 profesionales a las órdenes de los profesores Alfonzo Meoni y Hernán Castex.
