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Belgrano: el Ruso tiene la base

La Voz del Interior | 15/07/2013


el Ruso no cambia: orden colectivo y optimizar recursos, la clave de equipo
el Ruso no cambia: orden colectivo y optimizar recursos, la clave de equipo
“Una de las mayores virtudes de Bianchi es la simpleza. Y la otra: sacarle lo mejor a cada jugador”. Esa declaración le pertenece a Ricardo Zielinski (53 años) quien en más de una vez expresó la admiración hacia el DT de Boca. Pero así también dibuja su manera de dirigir. Eso hizo desde que llegó a Belgrano. Optimizar recursos y sacarle el jugo a cada futbolista.

La temporada 2013/2014 no será la excepción para el Ruso. En su cabeza ya piensa el “nuevo” Belgrano, aunque por nuevo se entiende que sólo cambiarán un par de piezas. La idea futbolística está clarita desde lo posicional: el 4-4-2 es el sistema táctico que utilizará cuando arranque la 1ª fecha del Inicial ante Lanús.

El primer paso es encontrar seguridad atrás. En el Final, el Celeste estuvo entre los menos goleados (13 tantos) y encontró en Luciano Lollo y Lucas Aveldaño seguridad y sincronización en la zaga, más el parejo nivel de Olave al arco. El 4 del equipo hoy es Pier Barrios, defensor que ahora sí será tenido en cuenta y, si bien su posición natural es central, aparecerá por ese sector. Claro, esto porque Gastón Turus se recupera de una lesión. Sí, Pier le gana la pulseada al juvenil Renzo Saravia. Quizá con Barrios pierde sorpresa en ataque pero gana orden táctico y eso para el Ruso es clave.

Al medio. “Para qué vamos a cambiar si mal no nos fue”, es otra de sus máximas. Y en mitad de cancha, el equipo mostrará un leve cambio: sin Zapata, aparece el refuerzo Sebastián Carrera para volantear. Al medio, la obediencia de Guille Farré más el panorama de Teté González le dan seguridad al equipo hacia atrás y adelante.

Otra variante es colocar a Affranchino de doble cinco, defender con tres y así ganar fluidez en el traslado del balón. Eso sí, la idea de equipo es ser cortos entre las líneas, presionar hacia los costados y salir rápido de contra. Arriba la esperanza es doble: volver a tener al Picante explosivo (dejó atrás varias lesiones) y contar con el oficio goleador y de distracción que tiene Carlos Bueno, el otro refuerzo que podría arrancar en el 11.

La Copa. Será un año distinto para Belgrano que tiene al menos dos partidos por Copa Sudamericana. Y eso también puede trastocar los planes. El martes 13 de agosto jugará (sería en el Kempes) ante Vélez el choque de ida y, el 29, el segundo cotejo. Allí el Ruso deberá pensar si hace rotación, pero el verdadero dilema aparecerá si el equipo accede a la fase siguiente. Por lo demás, el DT no quiere complicarse. Lo simple, bien hecho, trae sus frutos.

En Buenos Aires, para hacer más fútbol

La jornada de descanso vino justa para todos los jugadores. Después de una exigente fajina física en el parque Lillo, ayer sólo hubo tiempo para estirar las piernas y recuperar energías físicas y mentales. Es que hoy vuelven al trabajo los muchachos aunque en nuevo escenario: Buenos Aires. Atrás quedó Necochea para darle paso a más amistosos.

Mañana enfrentará a Quilmes, a las 15, en el predio de Ezeiza, en el primer juego programado. La idea del Ruso sería poner el siguiente equipo: Olave; Barrios, Lollo, Aveldaño y Quiroga; Carrera, Farré, González y Velázquez; Pereyra y Melano. Aunque también baraja probar nuevos sistemas. Ante Club del Valle, el Ruso puso un 3-5-2 para ensayar variantes y ganó fluidez en tres cuartos de cancha con Affranchino jugando de doble cinco adelantado.

Después llegará otro partido. Será el jueves ante Gimnasia L.P ante un rival de fuste para medir donde está parado el equipo.

Los trabajos físicos no acabarán, pero sí habrá más ejercicios con la pelota para ablandar piernas y encontrar ritmo de juego.

¿Más partidos? Quedará el clásico ante Talleres el 21 y el 27 contra Instituto.

Espera. Continúan las negociaciones con el arquero Matías Ibáñez, ex Godoy Cruz. Por ahora no está cerrado. En tanto, Mansanelli seguiría en Belgrano. Por Carranza no entraron ofrecimientos, y se entrena junto al resto de sus compañeros.

Zielinski

Desde que llegó a Belgrano, en diciembre de 2010, hasta hoy, jamás cambió su discurso y muchos menos sus hábitos. “Hay que hablar poco, no hacerse el filósofo y hacer simple lo difícil”, dijo. Y así fue: su mayor virtud fue explotar al máximo las virtudes individuales bajo una idea colectiva. Le funcionó. Su equipo no luce, pero juega bien. ¿Por qué? Porque pide al futbolista lo que sabe que puede darle. Cada vez que se le recriminó que era ofensivo, respondió al hueso: “Yo no vendo humos. Muchos dicen que defienden con tres y atacan con cinco, pero después eso no se ve”.

No sólo trabaja lo táctico, sino que su trabajo también es de discurso: “Hay situaciones que uno debe manejar para que nadie se confunda. El entrenador tiene que marcar claramente las pautas”, declaró alguna vez. Esas pautas son marcar objetivos a corto plazo y no pisar en el aire. Batió todos los récords posibles. Habla poco, no lo necesita.

Arranque Pirata

1) Lanús (V)
2) Boca (l)
3) Newell´s (v)
4) Gimnasia (l)
5) Atlético de Rafaela (l)

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