Claridad. El volante siempre tiene la palabra justa en la B.
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Guillermo Farré -31 años- no necesita presentación. Pero el legajo diría “futbolista referente de Belgrano, orden táctico, criterio dentro y afuera de la cancha”. En 2007 llegó a Belgrano, pero su horas más gloriosas se escriben ahora, mientras junio baila su otoño.
Es que la clasificación a la Copa Sudamericana marca un quiebre para todos. Y él no es la excepción. “La Copa es el logro más importante. Como deportista uno siempre piensa en las mejores cosas que te pueden pasar”, le cuenta a Día a Día el jugador de campo que más minutos tiene en la actual temporada.
“Antes, era ascender con Belgrano; eso era lo que más enaltecía. Después, mantener la categoría; y ahora esto”, explica y el buen semblante le domina el rostro. “Nos enorgullece y enaltece saber que pertenecemos a un grupo que piensa en cosas positivas.”
–¿Son conscientes de lo que logaron o todavía no caen?
–Muchas veces cuando se está afuera se toma mayor dimensión de las cosas. El tiempo nos dará una visión más grande de lo que hemos conseguido. Pero sí somos conscientes de que conseguimos algo importante, que la gente disfrutó mucho.
Ya habrá tiempo para hablar del grupo. Del equilibrio necesario para no marearse entre tantas fotos y elogios que después son espadas sin memoria.
Pero Farré todavía tiene su cuerpo en el avión en el cual regresó el Pirata el domingo a la noche.
–Imagino el festejo al regreso... ¿Pero en qué pensabas cuando volvías?
–Es un estado de ánimo el que uno disfruta. Te sentís pleno, que estás alegre en todo momento. Aun cuando está despegando el avión, te sentís en un aura de positivismo que muy pocas veces lográs encontrar. Te sentís realizado con lo hecho.
Guille es un tipo experimentado. Protagonista del gol a River en la Promoción. Pero el éxito, si domina la escena, puede complicarlo todo. Por eso el volante central mide las palabras aunque la emoción se le escape por todo el cuerpo.
–¿Cómo se hace para no perder el equilibrio, cuando hay elogios, fotos y son todas buenas?
–Pensás mucho en los malos momentos que has pasado. Cuando estábamos últimos en la tabla. No salíamos a la calle, ni si quiera podíamos ir a comprar el pan que siempre tenías una opinión no positiva. Pensás la vez que te dijeron que no ibas a llegar. Eso te hace click.
El ex Central Córdoba queda en silencio. Como recordando viejos tiempos que prefiere callar.
–¿Qué pensás ahora de las críticas de los medios y la gente?
–Sucede mucho eso. Gracias a Dios nosotros siempre hemos tenido la sabiduría de mirar lo que tenemos dentro, de no dejarnos llevar por lo que pretenden los de afuera.
Ahí está el secreto de Belgrano. No mentirse. “Somos fiel a nuestro estilo. Además sabemos que muchas veces desde afuera se juzga sin conocer la realidad de la interna. Conseguimos cosas importantes, porqué vamos a cambiar”, define el futbolista con 193 partidos en el Celeste.
Transmite la tranquilidad de quien ha perseguido un sueño con convicción. “La Copa es lo mejor que nos puede pasar”, dice Farré. Sin olvidar que el camino será siempre el mismo: la mesura, no relajarse jamás. Las rueditas del avión rascan el suelo cordobés. Él guarda las fotos, ríe. Sabe que mirándolas jamás tendrá un aterrizaje forzoso.
