Armando Pérez disfruta del momento personal.
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Antenoche, los dirigentes de la Asociación del Fútbol Argentino lo premiaron con el premio Alumni al mejor directivo. “Me alegró mucho que mis pares me hayan elegido. Es un reconocimiento anual y estoy muy halagado de haberlo recibido. Pero el mérito no es mío. Porque, para que a uno lo premien, hay un trabajo de mucha gente que trabaja a diario para el crecimiento de Belgrano”, fue la respuesta de Pérez a Día a Día .
El mandamás del Pirata, que estaba nominado junto a Mario Contreras, presidente de Godoy Cruz, y José Segura, de Argentinos Juniors.
“Son dos grandes dirigentes. Me felicitaron y me dijeron que lo tenía merecido”, comentó Pérez.
Para un directivo como él, que no hace mucho que está en el fútbol, fue un logro importante recibir este premio Alumni: “Uno nunca piensa en que le van a dar un premio. Hay que tomarlo, es un reconocimiento al trabajo. A lo mejor, también a lo que significó el trabajo que hizo el club. Uno trabaja para aprender todos los días y para mejorar”.
A pesar de los reconocimientos, de los buenos momentos que le toca vivir como dirigente de Belgrano, Armando Pérez no se la cree.
“Soy una persona que está apostando siempre para mejorar, aprender, corregir errores. Hay muchas cosas todavía para aprender y hay que pensar en tratar de ser mejores en todos los aspectos”, tiró Pérez como si fuera una máxima de vida.
Sigue adelante. Sobre la realidad del equipo celeste en el Inicial después de la derrota del lunes pasado contra Lanús, el presidente de Belgrano todavía tiene confianza. “No se cayó. Esto es un juego y todavía hay posibilidades. Nosotros tenemos como objetivo consolidar al equipo en Primera y se está logrando. Esto no es de una sola persona sino de todo el equipo que peleará hasta el último minuto, de eso estoy seguro”, aseguró Pérez.
Más allá de las chances perdidas o no para pelear por el torneo Inicial, el presidente celeste tiró el mensaje de siempre, que los hinchas se saben de memoria: “Esto va a seguir igual. Es un juego y despertamos ilusiones. Tratamos de estar tranquilos ni cuando estamos arriba ni cuando perdemos. Vamos a trabajar lo mejor que se pueda para llegar lo más alto”.
El futuro, muy cerca. Si bien faltan tres partidos y medio, si se cuenta el segundo tiempo que falta jugar ante Independiente el próximo miércoles, el cierre del año es inminente. Para Pérez, ya hay que mirar lo que viene. “Tanto nosotros como el cuerpo técnico sabemos cuáles son los déficit y virtudes y sobre eso trabajaremos conjuntamente”, afirmó. Y la frase de cierre es todo un mensaje para que los hinchas se ilusionen: “Estamos cerrando un año bárbaro pero en el que viene podemos mejorar”.
