Jazmín se llama su hija, a quien lleva en la piel en el sentido literal.
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“Es una pena que no se juegue (por ayer) pero uno es profesional y vamos salir a buscar los tres puntos”, dice el Chiqui jugador. Pero sus ojos lo delatan. La postergación del partido, son la postergación de Jazmín, de sus abrazos pequeños, enormes. “Uno la extraña siempre. Íbamos a tener el fin de semana libre pero ahora no podré. Tenía planificado estar con la familia; son cosas que pasan”, dice el Chiqui y habla como Chiqui padre. Pero ahí nomás le aparece Colón en la mente. Porque no se olvida de eso. “Vamos a salir a presionar, a hacer nuestro juego. Arrancamos bien pero todavía falta mucho. El partido ante Colón será difícil, ellos son un buen equipo aunque nosotros tenemos nuestras armas”, agregó el ex Tigre.
Y habla sobre las armas de este Pirata. “Los chiquititos de adelante nos ayudan a defender. Ellos tienen la pelota y nos obligan a jugar por abajo, a no revolearla. Ahora hay jugadores con buen pie y podemos generar situaciones”, analizó el DT.
Si no te gusta... Desde que llegó Ricardo Zielinski, muchos lo valoran pero varios critican la manera de jugar. De eso también habló el defensor, titular hoy. “Contra San Lorenzo lo buscamos por todos lados. Se dijo que no fuimos para adelante, que no arriesgamos. Capaz no se dieron cuenta que lo buscamos por todos lados”, expresó sagaz.
Aunque no come vidrio. Y defiende la forma de jugar del Pirata. “Tenemos una identidad, estamos convencidos. Además, hoy todos los equipos priorizan el cero en su arco. Si no mantenés el cero, te meten una patada, perdés dos partidos y te vas al fondo del mar”, graficó.
–¿Está bien que sea así?
–La verdad que no, pero es así. Igual, nosotros salimos a jugar, tenemos una idea. Hace un año y medio estamos convencidos de una forma y nos dio muchos y buenos resultados. Fijate, contra River fuimos efectivos. El tema es no perder el orden defensivo atrás.
El Chiqui llegó a Belgrano en enero de 2011. Con sacrificio se ganó un lugar. Y lo defiende: “Uno deja todo siempre, no se confía, dar lo mejor es lo mínimo que puedo hacer y en Belgrano me siento feliz”. Pero, a la hora de pronosticar el futuro del equipo, es cauto. “Hay que ir despacio. Esto cambia y la idea es encontrar equilibrio”.
Pero Chiqui ya no habla como jugador. Tiene voz de padre. Y le sale de adentro. “Mi hijita se llama Jazmín, mirá, tengo tatuados sus piecitos en el hombro”, dice y aquella sonrisa le vuelve al rostro. Ya no le importa la lluvia, el clima. Hoy, ante el Sabalero, dejará la vida. Chiqui Pérez, paso a paso para defender a Belgrano. Ayudado con los piecitos de Jazmín, la que abrazará cuando vuelva. Ella con sus bracitos cortos, pero capaces de rodear al mundo.
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52. Los partidos del defensor de 26 años en Belgrano. Ya hizo cinco goles. Llegó en enero de 2011.
