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Cualquiera diría que una persona que actué de esa manera debería tener éxito en su trabajo. Porque esos argumentos le sobrarían para ser elegido, en más de una ocasión, como el empleado del mes en su emprendimiento. Y eso es Guillermo Farré para Belgrano. Acaso el mejor “laburante” que tiene el equipo dirigido por Ricardo Zielinski y que también tiene el club desde hace cuatro años y medio.
Sí. Con una tarea que por ahí no llena los ojos de los líricos, el oriundo de Colón, Buenos Aires, es un jugador capaz de enamorar a cualquier amante de la táctica. A esos que admiran la ejecución correcta de los planes ideados. Y la demostración más clara está en que, desde mediados de 2007 a esta parte, cuando llegó a la B como refuerzo solicitado por el DT Francisco Ferraro, todos los entrenadores que pasaron por Alberdi (Mario Gómez, Dalcio Giovagnoli, Omar Labruna, Jorge Guyón y Zielinski) lo tuvieron en cuenta.
Tan en cuenta que mañana, cuando a las 15 el Pirata reciba Estudiantes, el volante central cumplirá 150 partidos en el Celeste. “Llegar a este número es algo muy lindo para mí. Voy a estar siempre muy agradecido a Belgrano, no sólo por abrirme las puertas, sino también porque hoy en día no es fácil permanecer tanto tiempo en un equipo de la Argentina. Uno está contento porque se encuentra en una situación futbolística que lo ilusiona, con una institución en Primera y muy organizada”, dijo Farré ante Día a Día.
El mismo Guillermo se define como “un laburante del fútbol”. Como un tipo al que le gusta llegar y asentarse en un equipo, sintiéndose parte importante. Sin embargo, cuando llegó a Córdoba nunca pensó alcanzar semejante cantidad de encuentros en el Pirata. “La verdad no lo imaginaba. Pero bueno, gracias a Dios los técnicos siempre me han tenido en cuenta. Uno se prepara para permanecer toda la vida en un club. Por lo menos así lo veo yo. Trabajo para quedarme siempre en Belgrano”, tiró el mediocampista que debutó en la B el 18/08/2007, ante Chacarita.
¿Cuál fue el momento más importante en el club? Está clarísimo: su gol a River en el Monumental, aquel 26 de junio de 2011 en el que el Celeste cambió para siempre la historia mandando al descenso al Millo. “Fue el momento más hermoso. Algo que marcará mi carrera para siempre, porque desde chico lo había soñado. Belgrano significa muchísimo en mi vida. Me ha dado la posibilidad de hacer realidad mis sueños. Pero ésto es una rueda que gira y gira y hoy me preocupa sólo una cosa: poder mantenerlo en Primera”, sostuvo Farré, quien disfruta a los 30 años de su primer temporada en el fútbol de elite Argentina.
Por otra parte, el ex Central Córdoba de Rosario, quien volverá al 11 luego de una fecha de suspensión, se refirió al duelo con el Pincha: “Tienen jugadores de mucha jerarquía y seguramente se nos presentará un partido abierto. Hay que aprovechar eso, pero hacerlo con paciencia. Tenemos 90 minutos para ganarlo”. Y, luego, en alusión a lo cercano que está la meta de salvar la categoría, cerró: “No sentimos ansiedad por llegar a los 50 puntos. Si nos pasara eso, podría jugarnos en contra. Hay que jugar cada partido como una final. Sólo debemos concentrarnos en los tres que vienen el domingo”.
Farré acelera y también Belgrano. Los dos están recorriendo juntos el camino correcto a una gran velocidad. A fondo. A 150.
ogropirata
