Hace cuatro años atrás, Necochea recibió al Belgrano de Ricardo Zielinskipor primera vez. En aquel tiempo era un equipo de la B Nacional que intentaba sumar para alcanzar a los de arriba que estaban muy lejos. El entrenador eligió la ciudad de la costa porque es “tranquila” y permite que el grupo se pueda “conocer mejor”.

Los años pasaron y en cada una de las etapas de preparación intensiva, el técnico regresa con sus dirigidos y sus colaboradores a las orillas del Parque Lillo a ponerse a punto en lo físico. Y en 2015 no fue la excepción, otra vez el Hotel Ñiken los recibió y se transformó en el lugar que los celestes tuvieron para prepararse para el torneo de Primera que se iniciará el mes que viene.
Es la novena vez que “el Ruso” y los Piratas desembarcan en estas playas de la costa argentina.

“Hemos hecho un buen trabajo y arrancamos el año con las mejores expectativas, como para hacer el mejor campeonato posible. Además esperamos que se den algunos resultados que nos permitan lograr el pase a la Sudamericana”, es lo primero que el DT le dice a Mundo D.

–Se fueron varios jugadores y han llegado pocos, ¿te incomoda esta situación?
–Es verdad que se alejaron dos ­delanteros ti­tulares (César ­Pereyra y Julio ­Furch), un par de volantes (Lucas Pittinari y Federico Pintos) y un lateral (Carlos Soto), y en contrapartida hemos traído a Sergio Escudero e Iván Obolo, cubriendo los otros puestos con algunos chicos del club. Espero que lleguen los refuerzos y se pueda hacer un buen plantel. Pero estoy conforme con lo que tengo, hubo una gran evolución de los chicos del club que nos dieron una mano bárbara. Además, la idea no es traer refuerzos por el solo hecho de traerlos. Si no son superiores a los que tenemos, no vienen y nos quedamos con lo que hay.

–¿Cuál es el objetivo que se plantea para este año?
–Vamos a intentar estar bien arriba. Trabajamos sabiendo desde dónde partimos y que hay equipos que tienen otros presupuestos. Pero la idea es repetir lo que se viene haciendo, porque hemos estado cerca siempre y salvo un torneo en el que hicimos 19 puntos, en los otros estuvimos siempre entre los de arriba.

–Tras cuatro años en el club, ¿la maduración de los juveniles te hizo dudar en el pedido de refuerzos?
–Hubo una evolución normal en los jugadores y algunos estarán este año y otros el que viene. Hemos sostenido juveniles en el tiempo para que lleguen bien al torneo que está por iniciarse, otros quedarán para el próximo. Lo importante es que Belgrano hoy tiene en el plantel 15 ó 18 chicos propios y ese es el capital más importante del club. Cuando llegamos no era así, el capital eran jugadores más grandes y sin el valor de estos futbolistas. De aquí a cuatro o cinco años habrá un gran recambio de futbolistas propios y es mucho más de lo que teníamos cuando arribamos.

–¿Veremos una forma de juego distinta?
–Somos pocos y están andando bien los muchachos, lo que es muy bueno. Aquí no importa si es grande o chico, juega el que esté mejor. ¿El sistema? No es tan importante, medianamente cambia, porque al principio es un número de teléfono. La idea es que cada jugador entienda lo que debe hacer y que juegue con libertad cuando tenemos la pelota, pero que sepa que hay responsabilidades a la hora de recuperarla. Nosotros no podemos darnos el lujo de ir y venir ante equipos que tienen futbolistas de selección, porque si lo hiciéramos atentaríamos contra el resultado más favorable para nosotros. Por eso nos inclinamos por un equipo por encima de las individualidades.

–Hay velas para que River le gane a Huracán y te dé una chance de revancha en la Sudamericana…
–No pienso en revanchas. Me gustaría jugarla nuevamente e intentar pasar de ronda para jugar con equipos de otro país y que los hinchas disfruten de un encuentro internacional con Belgrano. Si no se da, al menos hemos estado cerca. Para los que la ven de afuera, tal vez sea más fácil, pero no es sencillo.

–¿Es definitivamente tu último año en Belgrano?
–El único factor es mi familia. Llevo casi seis años lejos de mi casa y ellos me han pedido eso. Si algunos factores cambian y se da espacio para hacer otro análisis, lo haremos y veremos.