A lo crack. En la primera, el Cuqui estrelló la pelota en el travesaño. En la segunda, metió un golazo. Festejó así. (Foto: Ivana Maritano/prensa Belgrano).
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Lo desvela ella. Lo desvela la pelota y también Julieta Valentina, su primera hija que nacerá entre el 28 de febrero y el 5 de marzo. Porque Fernando Márquez será papá y por eso el festejo del gol fue con la pelota debajo de la camiseta, reflejando el estado de su pareja. Estado de felicidad también por el regreso al gol tras un año, y por la victoria de visitante después de tanto tiempo.
“Me venía comiendo la cabeza pasar un año sin convertir un gol. Para un delantero es difícil, te hace sentir el peor. Me sirve el gol para ayudar a enderezar el equipo, para mi mal presente y para mi mal presente. Me cambió la cabeza, hay que creer más en uno mismo”, destacó el Cuqui Márquez.
Fue determinante para el primer triunfo de Belgrano en Mendoza por el gol del empate, por el inicio del 3-1 y por ser la figura de la remontada Celeste en un Malvinas Argentinas donde había anotado su último gol.
“En esta cancha hice el último, más o menos para la misma fecha de torneo. Me siento bien y entré convencido. El Ruso me pidió que juegue más al medio y el Chino (Zelarayán) a un costado. Dimos vuelta un partido y es algo que nos cuesta mucho. Como dice Olave, hay que volver a las raíces, hay que meter mucho para no tener otro año malo. Queríamos sumar más de 25 puntos pero el torneo te da golpes. Ahora hay que salir a comerse la cancha en casa y volver a sumar de a tres”, lanzó un Márquez más enérgico y enchufado.
“No estoy jugando mucho, por eso quiero disfrutar este momento. Pienso en mi familia, en la bebé que nacerá el 28 de febrero o el 5 de marzo y se llamará Julieta Valentina, y en que ser papá me cambiará la vida. Ya con Rosario Central quería entrar, sentía que podía dar algo, que voy dejando atrás esa falta de confianza. Todo pasa por la cabeza, no es que te vas a convertir en Messi, pero si vas convencido de que podés ganar, tenés más chances”, afirmó el ex Crucero del Norte, muy elogiado por sus compañeros y el cuerpo técnico por sus condiciones, pero que tuvo un 2014 opaco, como el del equipo.
“Es un jugador excepcional. Entró y fue determinante, lo suyo contagió”, lo elogió Guillermo Farré.
“Cuando entré sabía que el equipo había hecho un buen primer tiempo y que lo podíamos dar vuelta. Por eso me dio bronca que la primera que tuve pegó en el travesaño. Por eso de las dudas y la falta de confianza, pensé que difícilmente me podía quedar otra. Vino el pase de Guille (Farré), por suerte el viento me jugó a favor y la pelota bajó para meterse detrás del arquero, Estoy volviendo a ser el de antes”, completó el Cuqui.
“Ya con Rosario Central quería entrar, sentía que podía dar algo, que voy dejando atrás esa falta de confianza. Todo pasa por la cabeza”, dijo el Cuqui Márquez.
Quinto
Fernando Márquez llevaba un año sin anotar goles. El último había sido en Mendoza, también ante Godoy Cruz, por lo que lleva dos goles contra el Tomba de los cinco que el ex Crucero del Norte convirtió con la camiseta celeste.
Afuera, tras ocho meses
Fue un sábado feliz y romperrachas para Belgrano. Es que por primera vez le pudo ganar a Godoy Cruz como visitante.
Pero más allá de ese dato de historial, lo que más satisfacción dejó en el equipo que conduce Ricardo Zielinski fue volver a ganar de visitante luego de ocho meses. La última vez había sido el 2-1 a Atlético de Rafaela, por la 5ª fecha del Torneo Final 2014, el 1 de marzo. Aquella vez a los goles celestes los marcaron el defensor Lucas Aveldaño y el volante Lucas Pittinari.
Acostumbrado a buenas campañas fuera de Córdoba (vale recordar que entre 2011 y 2012 estuvo 19 fechas invicto), Belgrano venía cruzado en 2014.
Otra estadística que dejó el 3-1 de ayer a Godoy Cruz, es que el Pirata por fin pudo ganar dos veces de manera consecutiva en 2014.
Lo había hecho en el cierre del Torneo Inicial 2013 por última vez, cuando venció de manera sucesiva a Tigre, Arsenal y All Boys.
Meter tres al hilo es la nueva meta del Celeste, que el sábado que viene recibirá a Defensa y Justicia en el estadio Kempes. ¿Otro sábado para las rachas?
Celestes. Los supuestos “neutrales” que había en el estadio Malvinas Argetinas, un centenar, y que mostró la televisión cuando festejaban los goles de la B.
