Pérez sabe que la situación no es simple.
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Pérez sabe que la situación no es simple.
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Belgrano se muestra como uno de los pocos clubes de nuestro medio que exhibe con orgullo su buen estado financiero y su balance sin números en rojo. Pese a eso, Armando Pérez le dijo ayer a Mundo D: “En un país con las dificultades económicas como las que tiene Argentina, tenemos que ser cautos y prolijos. Entonces, achicar los costos lo más posible es una obligación”.
El presidente celeste dejó en claro que el club no tiene “dificultades para afrontar sus compromisos y que no dejará de
pagar nada”, pero también manifestó: “El presupuesto debe ser respetado y no nos podemos apartar de él para que sigamos bien. Estamos en el límite y debemos hacer lo que se puede hacer y crecer en esa medida”.
Sobre lo que viene, Pérez fue contundente: “La inflación golpea al fútbol y no lo podemos evitar. Los sueldos y los gastos crecen; mientras los ingresos, no. Entonces, la única manera de generar recursos es con el reclutamiento de socios, pero es algo que no se ha dado en la medida en que esperábamos”.
“Tenemos que ser ubicados y saber dónde estamos. Nuestros ingresos son justos y no podemos repetir la historia del club y endeudarlo. Me suelen decir si voy a ‘hacer mucho ruido con contrataciones’ y eso no es posible, porque no tenemos dinero. En junio si me voy o me quedo está por resolverse, pero el club no llegará con una deuda de 200 millones como otros”, continuó Pérez.
Al referirse a la deuda que Palermo de Italia tiene con el Celeste por el pase de Franco Vázquez (1,8 millón de euros) dijo: “Estamos en una instancia judicial que nos da buenas perspectivas para cobrar. Es un dinero que el club necesita para seguir siendo uno de los pocos que no tiene números en rojo. Pero ante la incertidumbre de los ingresos y de la economía nacional, no podemos hacer cosas alocadas, sino bien pensadas”.
Finalmente, el directivo aseguró: “Invertir y crecer en estos tiempos es muy difícil. Tenemos que agudizar el ingenio para atraer nuevos socios. El dinero debe cuidarse y en mi caso más aún, porque administro plata que no es mía”.
