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Es que el grupo y factor de este equipo es 0 positivo y volvió a demostrar salud mental y física para resistir los embates en el segundo tiempo. Pero la otra lectura no sería tan alentadora: al Pirata en el último tiempo le viene costando. Sumó apenas 24 puntos en los últimos 22 partidos y, pese a que nadie puede discutir su andar en Primera, una alarma suena bajito.
De movida el Pirata mostró sangre caliente. Acostumbrado a jugar en terrenos adversario los dirigidos por Ricardo Zielinski saben de qué va la mano. Según los datos del periodista Mauricio Coccolo, como visitante en el ciclo del Ruso, la B mantuvo el arco invicto en 23 de los 50 partidos disputados. Y ayer, en el estadio Marcelo Bielsa, fue otra demostración. Con el Ruso, Belgrano mantuvo el arco en cero 48 veces de 106 con un porcentaje del 45%.
¿El punto conseguido en Rosario fue “0 positivo”? ¿Por qué sí? Porque generó situaciones en el primer tiempo, soportó el cansancio de haber jugado por la Copa Sudamericana la semana pasada ante Vélez y nunca entró en la desesperación. Positivo también para sumar el primer punto en el Torneo Inicial después de las caídas ante Lanús (0-3) y Boca (1-2) en el torneo local.
No es poco mantener el arco invicto. Pero hay más: jugar con el empate es algo que el Celeste sabe cómo dominar. Los números, según Coccolo, indican que Belgrano empató la mitad de los partidos disputados este año. Son 12 de 24 donde hizo 16 goles y le convirtieron 19.
Hace ruido. Pero también está el sonido de alerta. Es que la última victoria de Belgrano fue el 20 de mayo cuando venció 3-1 a Argentinos, en la Paternal, por el Final 2013. Desde allí acumula ocho partidos sin ganar con cinco empates y tres derrotas. Sí, hace un tiempo sumar de a tres le cuesta.
Se rescata la solidaridad para aguantar cuando la mano venía brava. La sangre pirata se vio convulsionada por el ajetreo de la Lepra, pero jamás corrieron riesgo los glóbulos rojos y, más allá de algún susto, la presión arterial no corrió grandes sofocones.
Así los dirigidos por Zielinski pupasaron el test (Newell’s, último campeón del Final) pese al desgaste físico ante Boca y Vélez.
Algunos ruiditos en la línea tienen sus fundamentos: la clasificación a la Copa Sudamericana se dio, sobre todo, por los 36 puntos que alcanzó la B en el Torneo Inicial.
Está claro que los números no lo acompañan en el último tramo. Le cuesta ganar y trabaja duro para superar un déficit que lo alejó de las alegrías: la eficacia. Es que en el último Final metió sólo 13 goles y así se le hizo cuesta arriba.
Recuerdos vivos. Lo de ayer hizo rememorar el 0-0 ante San Lorenzo por la 2ª fecha del Final. O el 1-1 frente a Racing en la 6ª jornada. Ni hablar el 0-0 en la Bombonera ante Boca, el 21 de abril, con la polémica actuación del juez Pompei. Aquella vez no convalidó un gol de Boca cuando la bocha sí había traspasado en su totalidad la línea del arco.
Más acá en el tiempo quedó el 0-0 ante Lanús de visitante. Aquella vez Belgrano conseguía los puntos necesarios para clasificar a la Copa Sudamericana.
El tema es el presente y empezar a responderse cuánto de positivo tienen estos empates. Ahora que Belgrano ya no debe clasificar a la Copa... sino jugarla.
Sin ganar, 8. Contando el Final 2013 y el Inicial 2013, la B lleva ocho sin sumar de a tres. De esos, perdió tres y empató 5.
3-1. La última alegría celeste (sacando la Copa), fue el 3-1 sobre Argentinos en el Final 2013.
La figura: Sebastián Carrera. El volante de Belgrano provocó con sus escaladas. En el local, Maxi Rodríguez lo mejorcito.
El árbitro: Néstor Pittana. El árbitro del partido tuvo una buena tarde. Llevó el cotejo cortito. Se le puede discutir un supuesto penal hacia Bueno. Le agarraron la camiseta
