Últimamente, su nombre se emparentaba más con
cuestiones médicas que futbolísticas. Las lesiones lo tenían de rehén y
de César Pereyra sólo importaba cómo iba su recuperación. Por eso, el
alivio de muchos al verlo ingresar en el segundo tiempo ante
Independiente y constatar que su nivel sigue vigente.
Algo falto de ritmo futbolístico, pero con el olfato y la potencia de
los buenos tiempos. Y lo más importante, con ganas de volver a ser el
de antes. “Estoy contento, luchando y tratando de aprovechar los minutos
que tenga para jugar”, señaló el atacante pirata, que en lo que va del
Torneo Final disputó sólo cinco partidos.
El año pasado se recuperó de una fractura de peroné que comprometió
los ligamentos mientras que en este fue intervenido nuevamente en el
tobillo derecho. A los 31 años, el santafesino demostró que además de
seguir “picante” no piensa bajar los brazos. Con 21 goles, es el máximo
artillero en la era Zielinski.
–¿Cómo te sentiste en tu segundo partido desde que volviste?
–Físicamente estoy bien, obviamente me falta fútbol, pero es cuestión de sumar minutos con partidos y agarrar ritmo.
–¿Se hace más larga la temporada con las lesiones?
–Tuve un año difícil, con la primera lesión y ésta que me agarró a
principios del torneo. Ahora trato de ponerme bien en lo físico: la idea
es terminar el torneo de la mejor manera y tratar de arrancar bien el
campeonato que viene.
–¿Cómo es lucharla después de estar parado un tiempo?
–Soy consciente de que vengo de un parate, más allá de que este fue
más corto que el anterior, pero entre los dos prácticamente estuve como
siete meses afuera y no es fácil volver. Así que estoy contento por eso.
Volví a jugar antes de tiempo y de a poco me voy sintiendo mejor.
–¿Te pone ansioso jugar pocos minutos?
–No, ansioso no. Quiero jugar. Obviamente, uno está afuera y cada vez
se va sintiendo mejor y tiene ganas de entrar. Pero también soy
consciente de que vengo de un parate largo y ya estoy en condiciones. El
técnico sabe que puede contar conmigo. Ya estoy en condiciones para
cuando me necesite entrar y hacerlo bien.
“El Picante” lamentó que tras una buena jugada su disparo se haya
estrellado en el travesaño de Independiente. Pero se mostró tranquilo,
consciente de que mientras cuente con oportunidades el gol llegará.
“Tuve esa y lamentablemente no pudo entrar. Con Rafaela (un cabezazo)
también pasó muy cerca. Va bajando, esperemos que para el próximo
partido entre, je”, auguró entre risas.
César Pereyra arribó a Belgrano en 2009 procedente de Unión, que
anoche descendió a la B Nacional, y a fuerza de goles se convirtió en
uno de los más queridos por los hinchas. Sufrió en el ascenso cuando las
cosas no le salían bien al equipo, pero tuvo su revancha en la
promoción ante River, donde fue uno de los protagonistas de un hecho
histórico. Hoy, como referente, cuenta con voz autorizada para analizar
este presente fecundo.
“Después de muchos torneos en los que Belgrano sólo pensaba en
salvarse del descenso, haber hecho dos campañas como las de los últimos
dos años y estar muy cerca de entrar a un torneo internacional es para
admirar y valorar mucho. Nos pone contentos”, señaló.
–La Sudamericana está ahí...
–Estamos a un paso. Tenemos que seguir. Era clave ganar con Independiente pero seguimos sumando.
–¿Hay ansiedad?
–No, el otro día con Argentinos se ganó un partido muy importante y
el del domingo también lo era. Pero el rival se estaba jugando algo muy
importante como el descenso y por eso se dio un partido así. Sabemos que
estamos cerca de la Copa, pero no hay que relajarse y sumar lo que nos
falta para clasificarnos.