Farré: No mentirnos entre nosotros | Club Belgrano de Córdoba

Hay convencimiento en el equipo, dice Farré.

Guillermo Farré se ríe. El clima en la práctica de Belgrano es el mejor. El triunfo 1-0 ante Godoy Cruz mantiene la confianza bien arriba. Pero nadie se relaja, todos tienen clarito el objetivo. Todavía no se logró nada pero hay lugar para el chiste. Y para la risa de Guille. Es que todavía se habla sobre si fue penal o no el que finalmente cobró Sergio Pezzotta después de que el volante central se mandara un jugadón.

“Es una jugada rápida. El defensor, al verse superado, intenta frenarme con el brazo. Cuando siento el impacto en el cuerpo me dejo caer pero además me desestabiliza. Cómo habrá sido la intensidad del jugador por frenarme que al caerme, el también cae atrás mío”, le contó a Día a Día uno de los referentes del Pirata.

Lo cierto es que el árbitro cobró penal y que el Chiqui Pérez lo canjeó por gol. Pero más allá de la caída, Farré realizó una jugada previa para desequilibrar en un sector de la cancha que no siempre ocupa. “Uno en la carrera futbolística pasó por distintas posiciones. Había sido un volante derecho ahora devenido en volante central. Entonces internamente tengo la ilusión de llegar al área rival sin descuidar la posición que me toca”, explicó el ex Central Córdoba.

–¿La noche que Farré volvió a ser 8 se podría definir?
–No, ja. Pero está bueno hacer cosas que no son predecibles para el equipo rival. Hay jugadores que son contención solamente y el rival cree que ese jugador no hará determinadas cosas. Por eso está bueno sorprender. A ver, Olmedo (volante de Godoy Cruz) no pasaba la mitad de cancha pero sabíamos que si lo hacía podía generar algo porque tiene con qué.

Bien claro. Belgrano tiene 15 puntos y ocupa un sitial de privilegio en el Torneo Inicial. Sin embargo, muchos opinan que “Belgrano tiene mucha suerte”. Consultado sobre si le molestaba ese rumor, Farré expresó: “No me molesta, depende de quién venga. Si viene de la interna nuestra, obvio que va a molestar. Ahora, lo que diga la gente externa al corazón de Belgrano son opiniones que respeto. A algunos les gustará cómo jugamos y a otros no, el tema es ser conscientes de la forma y tener una idea de juego”.

Y remarcó algunas claves que hoy tienen al Pirata entre los cuatro primeros del Torno. “No se negocia el sacrificio, la confianza y la solidaridad, son la base. Si en el partido jugás lindo o feo, esa base tiene que estar”, reflexionó Farré, de 31 años.

–¿La virtud de ustedes es que no se mienten, ya sea jugando bien o mal?
–Es una virtud tener una identidad como equipo y no mentirnos entre nosotros. Los jugadores y el cuerpo técnico somos los más convencidos y también los auxiliares. Sabemos cuál es el camino para afianzarnos en Primera.

El viernes, a las 21.15, el Celeste visita a Quilmes, que viene de perder 4-0 ante San Martín. Pero, para Farré, que el rival venga golpeado influye a medias. “Si nosotros hacemos bien las cosas, aumentaremos la desesperación de ellos y lo contrario si jugamos mal”, concluyó Farré, que el viernes pasado volvió a ser aquel viejo 8. Y le dio a Belgrano la llave para abrir la puerta del triunfo.